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Ácaros del Trébol: Guía Completa para Identificación y Control en su Hogar
Descubra qué son los ácaros del trébol, cómo identificarlos, su peculiar ciclo de vida y métodos de control.
La primavera es una época de alegría, donde muchos nos sacudimos el letargo invernal y pasamos más tiempo al aire libre. Sin embargo, esta estación también puede traer consigo visitantes no deseados a nuestros hogares. A medida que el clima se calienta, es posible que comience a encontrar pequeños puntos rojos que se mueven, especialmente alrededor de marcos de puertas y ventanas. A primera vista, estos minúsculos seres podrían parecer chinches, causando una alarma innecesaria. Pero no hay que entrar en pánico: no solo no son chinches, sino que ni siquiera son insectos.
Esos diminutos bichos rojos son conocidos como ácaros del trébol (Bryobia praetiosa), una especie de arácnido minúsculo que se encuentra en todos los continentes excepto la Antártida. Sus cuerpos miden apenas 0.75 a 0.85 milímetros de largo, lo que, irónicamente, los convierte en ácaros grandes dentro de su categoría. Los ácaros del trébol también se distinguen de otros ácaros domésticos comunes por dos características principales: su coloración rojiza-verdosa (inusual entre los ácaros que se encuentran en interiores) y sus patas delanteras. Como arácnidos, poseen ocho patas, pero en los ácaros del trébol, las dos patas frontales son aproximadamente el doble de largas que las otras y casi tan largas como su cuerpo, asemejándose a un par de antenas.
Les aliviará saber que los ácaros del trébol no pican ni muerden a humanos ni a otros animales, y no representan ninguna amenaza. Se alimentan exclusivamente de plantas y son atraídos a los asentamientos humanos por su afinidad con los céspedes fertilizados. Su aparición como plaga común se relaciona directamente con el aumento del uso de fertilizantes y la popularidad de los jardines durante la segunda mitad del siglo XX.
Un Ciclo de Reproducción Único en los Ácaros del Trébol

Una de las características más notables de los ácaros del trébol es su ciclo de reproducción muy inusual: son organismos que se reproducen asexualmente. A diferencia de sus primos arácnidos más grandes, las arañas, que requieren la fertilización del óvulo por el esperma masculino, los ácaros del trébol utilizan la partenogénesis. Este es un sistema de reproducción asexual en el que la descendencia se desarrolla a partir de huevos sin necesidad de fertilización alguna. De hecho, todos los ácaros del trébol conocidos son hembras; hasta la fecha, no se han observado especímenes masculinos.
Cada ácaro del trébol hembra pone aproximadamente 70 huevos. Después de la eclosión, la descendencia atraviesa cuatro etapas de vida: larva, protoninfa, deutoninfa y, finalmente, la adultez. No desarrollan sus dos últimas patas hasta la fase de protoninfa. El ciclo de vida completo se desarrolla en solo unas pocas semanas, y un solo año puede ver el nacimiento de cinco o seis generaciones de ácaros del trébol.
Los ácaros del trébol están más activos a finales de la primavera, ya que prefieren temperaturas en el rango de 21 a 29 grados Celsius (70-85 grados Fahrenheit). Cuando las temperaturas bajan demasiado o suben excesivamente, tanto los ácaros como sus huevos entran en un estado de latencia o dormancia. Sus huevos a menudo se encuentran resguardados en pequeñas grietas o hendiduras, tanto en entornos naturales como la corteza de los árboles, como en ambientes creados por el hombre, tales como las grietas de las aceras y las paredes de los edificios. Cuando el clima regresa a un estado favorable, los huevos terminan su letargo y miles de larvas de ácaro del trébol eclosionan y se dispersan, a veces llegando a lugares donde preferiríamos que no estuvieran.
Qué Hacer si Encuentra Ácaros del Trébol en su Hogar

Los ácaros del trébol no representan ningún peligro, pero sí son una molestia. Si descubre que su hogar está infestado por ellos, lo más importante es saber: ¡nunca aplaste un ácaro del trébol! Un pisotón firme es el primer instinto de muchas personas al ver un bicho, pero aplastar un ácaro del trébol dejará una mancha roja que es aún más molesta que la propia plaga. La única forma efectiva de eliminar los ácaros del trébol de su hogar es aspirar los cúmulos con una aspiradora, pero debe asegurarse de desechar inmediatamente la bolsa de la aspiradora para que los ácaros no puedan escapar. Una opción más sencilla es simplemente esperar, sabiendo que tan pronto como las temperaturas se vuelvan demasiado frías o calientes, desaparecerán nuevamente en su estado de latencia.
La prevención es la clave para ahorrarse el dolor de cabeza que suponen los ácaros del trébol. Si estos ácaros están llegando a su hogar, es probable que tenga un jardín u otra vegetación creciendo justo contra el edificio. Mantener una franja de tierra sin plantas de aproximadamente un metro (tres pies) de ancho alrededor de su casa actuará eficazmente como un foso alrededor de un castillo, manteniendo a los ácaros del trébol alejados. La otra medida clave a tomar es asegurarse de que no haya aberturas para que los ácaros viajen, buscando y sellando con masilla cualquier grieta alrededor de sus ventanas o en el exterior de su casa.