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Cometas: Origen, Órbitas y el Fenómeno del Cometa Diablo

Explora el fascinante mundo de los cometas, sus órbitas, orígenes en el Cinturón de Kuiper y Nube de Oort, y el Cometa Diablo.

Cometas: Origen, Órbitas y el Fenómeno del Cometa Diablo

Cada año, en promedio, una fascinante variedad de cometas cruza la órbita de la Tierra. Se estima que alrededor de diez cometas de periodo largo y veinte de cometas de periodo corto realizan este viaje celeste. Los cometas de periodo corto se caracterizan por sus órbitas alrededor del Sol que duran menos de 200 años, residiendo principalmente en el Cinturón de Kuiper, una vasta región helada que se extiende más allá de Neptuno. Por otro lado, los cometas de periodo largo emplean mucho más tiempo en completar su órbita y se originan en la remota Nube de Oort, una esfera de cuerpos helados que envuelve nuestro sistema solar. Un ejemplo notable de estos visitantes celestes es el Cometa 12P/Pons-Brooks, apodado el “Cometa Diablo”, que, con un periodo orbital de aproximadamente 71 años, ha protagonizado acercamientos significativos a la Tierra en el pasado reciente.

El Cometa 12P/Pons-Brooks, su denominación oficial, es un objeto que ha capturado la atención de astrónomos y entusiastas por igual. En su aproximación más cercana al Sol, conocida como perihelio, alcanzó su punto de mayor brillo, siendo notablemente visible desde el Hemisferio Norte en eventos pasados. Posteriormente, en otro hito orbital, realizó su máximo acercamiento a la Tierra, situándose a una distancia de más de 143 millones de millas, lo que equivale a una vez y media la distancia de nuestro planeta al Sol. En ese momento, se hizo visible para observadores en el Hemisferio Sur. Estos eventos, aunque específicos en el tiempo, ilustran el comportamiento típico de los cometas a medida que transitan por el sistema solar interior.

El apodo de “Cometa Diablo” comenzó a popularizarse debido a una actividad explosiva inusual observada en su superficie. Generalmente, los cometas están compuestos por una mezcla de polvo, gas y hielo. Los científicos sospechan que el Cometa 12P/Pons-Brooks es de naturaleza crióvolcánica. Esto significa que su material interno, al ser calentado por la radiación solar, experimenta un aumento de presión que provoca erupciones en forma de chorros de gas y polvo. Esta característica particular es la razón por la cual, además de las partes habituales de un cometa (núcleo, coma y cola), el 12P/Pons-Brooks desarrolló lo que parecían ser dos ‘cuernos’ o colas durante sus aproximaciones y alejamientos del perihelio, una manifestación visual de su actividad interna.

¿Por qué el Cometa Diablo y otros cometas se acercan a la Tierra?

Cometas: Origen, Órbitas y el Fenómeno del Cometa Diablo Aunque el Cometa Diablo se mantuvo a millones de millas de distancia en su punto más cercano a la Tierra, su trayectoria, al igual que la de otros cometas, nos permite comprender por qué estos objetos celestes pueden aproximarse a nuestro planeta. Para entender este fenómeno, es fundamental primero conocer su origen y la dinámica que rige sus viajes a través del espacio.

Los cometas de periodo corto, como el 12P/Pons-Brooks, son cuerpos helados que nacen en el Cinturón de Kuiper, una vasta región de escombros cósmicos que orbita el Sol más allá de Neptuno. Cuando estos objetos colisionan entre sí o son perturbados por la gravedad de planetas gigantes, fragmentos pueden ser desviados hacia el interior del sistema solar. La poderosa gravedad de Neptuno primero, y luego la de Júpiter, puede ‘tirar’ de estos fragmentos, alterando sus trayectorias. A medida que se acercan al Sol, los cometas ganan velocidad. Eventualmente, la fuerza gravitacional del Sol es tan inmensa que cambia drásticamente su trayectoria, haciendo que se ‘lancen’ alrededor de la estrella en una órbita elíptica altamente excéntrica. Del mismo modo, cuerpos cercanos en el espacio pueden interactuar gravitacionalmente con objetos en la Nube de Oort, la extensa esfera que envuelve nuestro sistema solar, impulsándolos a convertirse en cometas de periodo largo con trayectorias que los acercan al Sol.

La órbita elíptica es, sin duda, la razón principal por la cual los cometas pueden acercarse a la Tierra en ciertos momentos. Su acercamiento depende de una compleja conjunción: la posición de la Tierra en su propia órbita y el punto exacto donde el cometa cruza la trayectoria de nuestro planeta. No obstante, existen otros factores que influyen en estas aproximaciones, como las perturbaciones gravitacionales causadas por los planetas y las colisiones con otros objetos celestes que pueden alterar su curso. Es importante recordar que el destino de los cometas es variado: algunos pueden estrellarse contra el Sol, mientras que otros simplemente agotan sus materiales volátiles, se ‘apagan’ y se vuelven cometas inactivos o ‘dormidos’, transformándose en meros rocas espaciales.