Roma Eterna: Domina el Metro para Explorar la Ciudad y sus Tesoros Históricos

Roma es un lugar verdaderamente único en el mundo. La Ciudad Eterna es un torbellino de caos vibrante y fascinante, donde la modernidad y la historia antigua caminan codo a codo, y la vida, de alguna manera, se mueve tanto rápido como lento a la vez. Es el centro de una religión global, fue la capital de uno de los imperios más grandes que jamás existieron y es, sin duda, una de las ciudades más influyentes en la historia del mundo. Alberga impresionantes ruinas antiguas, iglesias extraordinarias, una arquitectura histórica magnífica e incluso tiene un país completamente separado dentro de sus límites: el Vaticano. Y todo esto antes de empezar a mencionar la comida, la moda y el estilo de vida general que hacen de Italia un destino tan emocionante.

La Ciudad Eterna es un lugar sorprendentemente compacto, así que incluso si solo tienes un día para pasar en Roma, puedes lograr mucho. Sin embargo, con tanto que ver y hacer, es importante maximizar tu tiempo. Hay algunos consejos y trucos para visitar los destinos más populares de Roma sin las multitudes, pero en última instancia, si quieres aprovechar al máximo tu viaje, ¡necesitarás encontrar una manera de moverte por la ciudad de forma rápida, eficiente e idealmente sin gastar una fortuna!

Los turistas a menudo tienden a limitarse a los taxis y las aplicaciones de viaje compartido al navegar por una nueva ciudad. El transporte público a menudo puede parecer confuso y difícil de entender. Pero el sistema de Metro de Roma es, sin duda, la mejor manera de moverse por la ciudad. Es rápido, asequible y eficiente, ofreciendo un método sencillo y práctico para ir de una atracción a otra. ¡También es el medio de transporte más popular entre los romanos, lo que te dará un poco de credibilidad local extra!

Usando el Metro de Roma

El Metro de Roma puede ser la red de metro más pequeña de Europa, pero cubre todas las atracciones principales y es significativamente más confiable que el chirriante e ingobernable sistema de autobuses que incluso los lugareños tienden a evitar lo más posible.

El Metro de Roma es sencillo de entender, y el mapa es fácil de descifrar. Solo hay tres líneas de metro: A, B y C (esto no es la complejidad bizantina del metro de Nueva York o el mapa gloriosamente diseñado pero abrumador del metro de Londres). La Línea A va de Battistini en el noroeste a Anagnina en el sureste, y pasa por atracciones como la Basílica de San Pedro, el Vaticano, la Fontana di Trevi y el Arco de Trajano. La Línea B se encuentra en el otro eje, yendo del noreste al suroeste, y pasando por el Coliseo, el Circo Máximo y parques y museos en el sur. La Línea C es menos útil para los turistas, aunque sí conecta con el aeropuerto de Roma Fiumicino “Leonardo da Vinci”, uno de los principales aeropuertos de la ciudad. Las tres líneas convergen en Termini, la estación de tren principal en el centro de la ciudad.

A diferencia de las redes de metro en lugares como la vibrante ciudad europea de Copenhague, el Metro de Roma no es un servicio de 24 horas. De lunes a jueves, opera de 5:30 AM a 11:30 PM, y de viernes a domingo, opera de 5:30 AM a 1:30 AM. Sin embargo, hay autobuses que siguen las mismas rutas que la Línea A y la Línea B que toman el relevo una vez que el Metro cierra, operando durante toda la noche.

Comprando boletos para el Metro de Roma

La mejor razón para viajar en Metro en Roma es el costo. Es una forma increíblemente asequible de moverse, mucho más barata que estar constantemente tomando un taxi, y como beneficio adicional, ¡evitas el tráfico que plaga el centro de la ciudad de Roma!

Un boleto sencillo dentro de un período de 100 minutos a cualquier lugar del sistema de Metro cuesta solo 2 € (aproximadamente 2.30 $ USD). Si realizas múltiples viajes que terminan dentro de 100 minutos, puedes usar el mismo boleto. Puedes comprar boletos por adelantado y usarlos cuando los necesites. También puedes comprar boletos para todo el día que cubren tantos viajes como desees dentro de un período de 24, 48 o 72 horas, o pases semanales, mensuales o anuales. El costo por 24 horas es de 9.30 € (10.50 $ USD), por lo que vale la pena calcular cuántos viajes planeas hacer. Si no vas a hacer más de cuatro viajes, vale la pena quedarse con los boletos individuales.

Puedes comprar boletos en las máquinas expendedoras de las estaciones de Metro o en pequeñas tiendas de conveniencia llamadas tabacchi. Si gastas más de 7 € en boletos de una máquina, automáticamente recibirás una tarjeta recargable para usar durante tu estadía, ¡lo cual es más conveniente que usar múltiples boletos de papel y es un lindo recuerdo!